Mediante una certificación emitida por el Ministerio de Gobernación (MIGOB), el régimen de Daniel Ortega concedió la nacionalidad nicaragüense al "periodista" estadounidense Benjamin Norton.
La resolución no.3380, firmada por Juan Emilio Rivas Benites, Director de la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) señala que Norton cumplió con los requisitos establecidos en la Constitución Política para adquirir la nacionalidad nicaragüense, ya que reside permanentemente en el país desde 2021.
Sin embargo, el artículo 53 de la Ley 761 o Ley General de Migración explica que ciudadanos de otros países, a excepción de Centroamérica y España, deberán comprobar haber residido en Nicaragua por cuatro años, a partir de la fecha de la obtención de la cédula de residente permanente, previa renuncia de la nacionalidad de origen o adquirida.
Norton, que se identifica a sí mismo como "periodista, investigador y escritor", es nacido en Ciudad Perú, Indiana, Estados Unidos, se dio a conocer en Nicaragua en 2019, cuando entrevistó a Daniel Ortega junto a su colega Max Blumenthal.
Tanto Blumenthal como Norton resaltaron en la entrevista "la labor del FSLN" y de Daniel Ortega durante el estallido social en 2018, y al igual que los medios oficialistas responsabilizaron a los opositores del supuesto "intento de golpe de estado".
Desde ese momento, Norton se convirtió en una "figura importante" para Ortega, ya que en su blog publica artículos y supuestas investigaciones donde demuestra el patrocinio de Estados Unidos a la oposición nicaragüense. Además, fue utilizado como acompañante electoral en las votaciones presidenciales del 2021.
Mientras el régimen continúa nacionalizando a extranjeros como los expresidentes salvadoreños Mauricio Funes y Salvador Sánchez Céren, el primero prófugo de la justicia, 317 nicaragüenses fueron despojados de su nacionalidad y 222 desterrados del país.
En el caso de los periodistas, el más reciente desterrado es Marcos Medina, Director de Fuentes Confiables, que pretendía retornar a Nicaragua el 24 de julio, sin embargo la DGME le notificó a través de la línea aérea que ni él ni su familia podían entrar al país.
Organizaciones como Reporteros Sin Fronteras (RSF) y la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) mantienen a Nicaragua en la lista roja de países en que es de alto riesgo ejercer el periodismo.