Continúa pesadilla de migrantes nicaragüenses en México. Dos hermanos de Carazo están secuestrados

Kevin y Kenny Vega Velásquez, son dos jóvenes hermanos originarios de la comunidad Los Marqueses, en el departamento de Carazo, que como miles de nicaragüenses han decidido salir del país en busca de una "mejor vida" en Estados Unidos.

Sin embargo, en medio de la travesía, y especialmente en el paso por México, los migrantes son víctimas de robos y secuestros por parte de los diferentes grupos delincuenciales que operan en ese país. Este es el caso de los hermanos Vega Velásquez, ambos fueron secuestrados el pasado 8 de diciembre y sus captores piden 20 mil dólares a cambio de su libertad.

Junniette Velásquez, madre de los dos jóvenes relató al diario La Prensa, que el calvario de sus hijos inicio al entrar a territorio mexicano ya que fueron retenidos durante 13 días por autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM), luego de ser liberados, fueron capturados nuevamente pero solamente por tres días.

Finalmente, ambos jóvenes, en compañía de una amiga contactaron a un nuevo coyote, no obstante, al hotel donde se hospedaban apareció un hombre que dijo ser "enviado" por el traficante de personas, pero en vez de ayudarlos a llegar, los secuestro.

La primera llamada que recibieron los padres de Kevin y Kenny fue el 8 de diciembre a eso de las 2 de la tarde, cuando el secuestrador les exigió a gritos pagar los 20 mil dólares para el día viernes, sino serían asesinados. Pero debido a los ruegos, los secuestradores extendieron el plazo para el sábado pasado.

Hasta el momento, los familiares, con ayuda de la población lograron recolectar 2,600 dólares, pero todavía tienen un saldo pendiente para salvar la vida de Kevin y Kenny. Si usted desea colaborar puede llamar a los números 8177-3811 / 7783-8411

Recientemente, las autoridades mexicanas han realizado rescates masivos de miles de migrantes que habían sido secuestrados en al menos 12 buses por el crimen organizado en Durango. De igual modo, los migrantes han denunciado la complicidad de las compañías de buses y algunos policías municipales para los secuestros.