En menos de una semana el régimen de Daniel Ortega ya ordenó el cierre de los consulados de Nicaragua en Houston, Texas y en Los Ángeles, California, según han denunciado nicaragüenses en esas ciudades a través de las redes sociales.
El pasado viernes 19 de enero se conoció el cierre del consulado en Los Ángeles, una ciudad donde residen cientos de nicaragüenses y que a partir de ahora si necesitan realizar algún trámite deberán dirigirse a las oficinas ubicadas en Miami, Washington y Nueva York.
"El Consulado General de la República de Nicaragua en Los Ángeles, California, por este medio informa a todos sus connacionales que el consulado de la ciudad de Los Ángeles cesa funciones a partir de hoy 19 de enero de 2024", expresa una hoja a las afueras de la oficina.
A este, se suma el ubicado en Houston, que al igual que el de la ciudad californiana avisó de su cierre a través de un anuncio impreso colocado en la pared del local donde funcionaba. Ambos se han realizado sin previo aviso y de manera inmediata.
"El consulado está cerrado permanentemente. Por favor, lea la nota en la puerta. Disculpen las molestias", expresa la escasa información. Y de igual forma refieren a los nicaragüenses a las sedes de Miami, Washington y Nueva York.
Hasta el momento se desconocen los motivos del cierre de estas oficinas consulares que tienen como objetivo ayudar a los nicaragüenses en la gestión de trámites y brindar cualquier tipo de información que requieran los connacionales residentes.
Para el exdiplomático Arturo McFields, el cierre de estos podría deberse a razones económicas y políticas. La primera para priorizar recursos para nuevas embajadas en Asia y África y la segunda para tener un mayor control en el exterior.
"Dictadura de Daniel Ortega cierra consulado de Nicaragua en Houston. En tiempo récord reducen consulados a la mitad. Venganza política y crisis financiera. Priorizan recursos para nuevas embajadas en Asia y África", posteó McFields en su cuenta de X.
Nicaragua poseía en Estados Unidos al menos seis consulados, ubicados en Nueva Orleans, Houston, Los Ángeles, Miami, Nueva York y Washington. Con estas acciones del régimen, los nicaragüenses en Estados Unidos tendrían más dificultad para realizar algún trámite ante las autoridades nacionales.
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