Por cuarto año consecutivo Nicaragua es uno de los cuatro países de América Latina donde no existe la libertad de expresión, esto según el índice de Chapultepec que analiza a 22 países en materia de libertades de expresión y de prensa.
Además de estar en la lista roja, el país "toco fondo" al situarse por segundo año consecutivo en el último lugar por debajo de Cuba y Venezuela, los otros dos que integran este "selecto grupo" de violadores a la Libertad de prensa y expresión.
En este 2023, Nicaragua obtuvo un marcador de 8,50 puntos de un máximo de 100, ya que la ausencia de estos derechos es evidente por la estructura represiva que tiene lugar en todos los entornos y dimensiones del país.
Para obtener estos resultados, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) analizó el período comprendido entre el 2 de agosto de 2022 al 1 de agosto de 2023 y lo califcaron como un "lapso muy hóstil" del régimen con 167 agresiones a periodistas y medios independientes.
De acuerdo a la SIP, el cierre de canales de televisión y radioemisoras demuestran el grado de inseguridad jurídica que vive el país, donde los medios de comunicación son cerrados en clara violación a los procesos y normas que establecen las leyes del país.
En 2022, una de las acciones que más resonó a nivel internacional, fue la suspensión de la señal de CNN en español de las cableras, una orden expresa del régimen debido a que prácticamente era el único espacio televisivo donde se denunciaba abiertamente lo que ocurría en Nicaragua.
En este 2023 lo que ha predominado son las detenciones, hostigamiento, confiscaciones y el destierro a periodistas que continuaban ejerciendo la titánica labor de informar en medio de tanta represión.
Estado, el principal represor
El Estado, ha sido identificado como el principal cabecilla de la represión contra los periodistas y ciudadanos nicaragüenses que emitan una opinión en contra al partido de turno.
"El periodismo crítico e independiente ha sido exterminado de Nicaragua y la ciudadanía guarda silencio frente a los abusos policiales, carestía de la vida, mal servicio de la salud, educación. Nada puede ser cuestionado por ese pueblo al que el gobierno llama irónicamente, "el pueblo presidente", denuncia la SIP en el índice.
La SIP también determinó que la única forma para que la ciudadanía logre acceso a las noticias, es a través de los medios de comunicación digitales, la mayoría nacidos desde el exilio forzado, pero que cuentan con una agenda de derechos humanos y denuncias contra el régimen, ya que los noticieros en televisión abierta únicamente cubren sucesos, farándulas, deportes o empresariales.
De 2018 a la fecha, el periodismo independiente nicaragüense ha visto como día tras días se han ido reduciendo los espacios y como se criminaliza la profesión, lo que ha originado que más de 200 hombres y mujeres de prensa decidieran salir del país para no ser apresados.
Comments