El régimen Ortega-Murillo se acaba de apropiar de las exportaciones de café de Nicaragua, esto tras el cierre de operaciones de CISA, la principal exportadora del grano de oro en el país.
A través de un comunicado, el régimen aseguró que hará que la empresa "cumpla" con sus compromisos comerciales y financieros en Nicaragua.
"Como Estado responsable ya estamos haciendo todo lo que, de acuerdo con la Constitución y las leyes, nos corresponda para que la empresa CISA exportadora cumpla con sus compromisos comerciales y financieros", reza la misiva.
De acuerdo a la nota de prensa divulgada en medios oficialistas, el régimen indica que facilitará la comercialización y exportación del café a través de las instituciones gubernamentales que trabajan con este sector. Además, afirmó que realizará gestiones con países que estén interesados en adquirir la producción.
En cuanto a los motivos del cese de operaciones de la empresa, la pareja presidencial desligó al país de ser la causante, ya que afirman que Nicaragua está en un momento de "crecimiento económico y progreso social". y la situación ocurrió en todos los países donde operaba Mercon Coffee Group.
"...Se trata de una quiebra de operaciones global que no está ocurriendo solamente en Nicaragua, sino también en Brasil, España, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, Panamá, y Vietnam. Este problema está ajeno a la realidad nicaragüense que se encuentra en um momento de crecimiento económico y progreso social", indican.
Cafetaleros en incertidumbre
Bajo una total incertidumbre se encuentran productores cafetaleros del norte de Nicaragua ante la suspensión de operaciones de CISA, la principal acopiadora, procesadora y exportadora del grano de oro del país.
Hasta el momento se desconocen las causas exactas que obligaron a la empresa a cerrar sus operaciones en Nicaragua, pero de acuerdo al diario La Prensa existen varias versiones, una de ellas es la quiebra de Mercon Coffee Group, que hace algunos meses fue vendida a la compañía RCG capital management, un fondo de inversiones estadounidense que recientemente se declaró en quiebra.
El silencio de CISA, crea más zozobra entre los productores que ven con preocupación este cierre, ya que la empresa no solo exportaba el café, sino que brindaba asistencia técnica, procesamiento, lavado del grano, e incluso daba crédito a través de una especie de microfinanciera llamada Mercapital.
Lo cierto es que por cualquiera que sea el motivo de cierre los principales afectados son los productores, ya que CISA exportaba la mitad de la cosecha cafetalera, que en los últimos años era cerca de los 1.50 millones de quintales. Además, se verán perjudicados porque los beneficios no cuentan con la capacidad para procesar tales cantidades de café.
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