Con su vehículo estrellado violentamente contra un poste, con el motor aún caliente y humeante, mientras su cuerpo inerte quedó doblado sobre la silla del copiloto, minutos después de haber recibido una serie de impactos de balas. Así terminó la vida del mártir de las libertades públicas Perdo Joaquín Chamorro Cardenal (PJCH), el 10 de enero de 1978, cuando el reloj marcaba las 8: 30 de la mañana, al momento en que se dirigía a las instalaciones del Diario La Prensa.
Chamorro fue un férreo crítico de la dictadura somocista, y desde la trinchera de su periódico fiscalizó, criticó y cuestionó al poder, por eso una de sus frases célebres de “Nicaragua volverá a ser república”, aún retumba y sigue vigente en la actual crisis sociopolítica del país.
Según un analista político de Nicaragua, que prefirió el anonimato por seguridad, PJCH fue un visionario y por eso el pueblo de Nicaragua debe de dejar establecida sus palabras porque el país se mantiene bajo la bota militar de otra dictadura, que tarde o temprano se tendrá que sacudir.
“Esa frase no se debe de olvidar en estos tiempos contemporáneos porque tenemos una deuda con nuestra nación, ya que todavía no gozamos de una libertad total y no es una República con derechos plenos para sus ciudadanos, porque un reducido grupo ha usurpado el poder en este país, violando todos los derechos fundamentales de la población, incluso ha atentado contra la propia familia de este héroe nacional”, cuestionó.
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Y es que por segundo año consecutivo, tres de los hijos de Pedro Joaquín Chamorro, no podrán depositar siquiera una flor a la tumba de su padre este martes cuando se conmemora el 45 aniversario de su magnicidio, porque están presos y exiliado en el marco de la persecución del régimen sandinista contra la población de Nicaragua.
El brazo represor del Estado de Nicaragua también alcanzó a otros miembros de esta familia como a Juan Sebastián Chamorro, precandidato presidencial de la oposición y a Juan Lorenzo Holmann Chamorro, gerente general del Diario La Prensa, cuyas instalaciones fueron allanadas y expropiadas de forma ilegal en agosto del año pasado por el oficialismo.
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En 2012 la Asamblea Nacional, dominada por la aplanadora orteguista, declaró a Pedro Joaquín Chamorro Cardenal como Héroe Nacional, sin embargo en la actualidad su periódico La Prensa, fue confiscado por el régimen orteguista y sus maquinarias han sido robadas para el proyecto político del partido de gobierno, mientras sus hijos han sido encarcelados y exiliado, como son los casos de Pedro Joaquín, Cristiana y Carlos Fernando Chamorro Barrios, respectivamente.
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