Transporte acuático de Bluefields a Corn Island deja mal sabor a turistas

El servicio de transporte acuático de Bluefields a Corn Island es desordenado, con pésima atención, con espacios incómodos y sin medidas de seguridad para quienes se transporten, denunciaron varios usuarios del pacífico que viajan para pasar sus vacaciones de Semana Santa en la pequeña isla.

Lo peor es que todo ocurre ante la vista de funcionarios de la Empresa Portuaria Nacional, EPN, la que debería fiscalizar el cumplimiento de las normas mínimas del servicio.

Este fin de semana, decenas de turistas extranjeros y veraneantes locales, llegaron al muelle de Bluefields, Región del Caribe Sur, para viajar hacia la isla de Corn Island en la embarcación “Hilario Sánchez” de la EPN.

Lo que no esperaban era el desorden y la mala calidad del servicio por un viaje por el que pagan 500 córdobas de ida y de regreso. “Si vale tanto, lo mínimo que uno espera es que te traten bien”, se quejó un viajero que pidió exponer su molestia sin revelar su identidad, para evitarse problemas con las autoridades de gobierno.

Sin ningún control

Pese a que esta temporada es alta y que los empresarios turísticos de la zona esperan que las autoridades procuren un buen servicio de transporte para que se mueva el comercio en sus comunidades, la regulación y el orden estatal es lo que más faltó este fin de semana.

Quedó en evidencia que los funcionarios de la EPN, no estaban preparados para la cantidad de personas que demandaron un buen servicio al comenzar las vacaciones de verano. Las embarcaciones no dieron abasto y el mal servicio se impuso, dejando un mal sabor entre los viajeros que pretendían disfrutar de la isla caribeña.

Sin medidas de seguridad

Otros usuarios dijeron para este reporte, que a la mala atención se le debe agregar las condiciones del muelle municipal en Bluefields.

Denunciaron que pese a la presencia de oficiales de la Capitanía de Puerto, muchos viajeros abordaron sin chalecos de seguridad y la embarcación viaja sobrepasando el límite de pasajeros lo que representa un riesgo tomando en cuenta las fuertes olas debido a los vientos de temporada. “Se convierte en una travesía peligrosa”, agregó.