En un mitin político ante una gruesa masa de seguidores, el expresidente Donald Trump, anunció la noche de este martes, su candidatura presidencial de los Estados Unidos para las elecciones presidenciales de 2024, por tercera ocasión consecutiva, después de tener tres meses en suspensos a sus adeptos.
“¿Están listos? Yo lo estoy. El regreso de América empieza ahora mismo. Para conseguir que América vuelva a ser grande y gloriosa, anunció esta noche mi candidatura a la presidencia”, dijo ante la audiencia reunida en su mansión de Mar-a-Lago en la Florida.
El exmandatario estadounidense dio a conocer su candidatura una semana después de que se realizaron las elecciones de medio término en Estados Unidos, donde el Partido Demócrata logró mantener el control del Senado, pese a las amenazas de Trump de lograr que una marea roja se apoderara del Congreso.
Aunque parece que los republicanos controlarán la Cámara de Representantes, miembros de su propio partido han acusado a Trump de ser uno de los principales responsables del resultado desfavorable en el Senado. Muchos de los candidatos más radicales que Trump apoyó durante la campaña acabaron perdiendo sus contiendas.
Referente a la política criolla con Nicaragua, durante la administración Trump, el régimen de Daniel Ortega sufrió severas sanciones tanto a funcionarios estatales como a empresas ligadas al partido de gobierno, a raíz del contexto de la represión gubernamental por las protestas civiles iniciadas desde abril de 2018 en este país centroamericano.
Durante los dos últimos dos años de presidencia, Trump impuso sanciones a unos 27 funcionarios del gobierno de Nicaragua acusándolos de cometer graves violaciones a los derechos humanos de la población nicaragüense, prácticas antidemocráticas y corrupción. También sancionó a 9 entidades por estar vinculados a negocios ilícitos desde el Estado nicaragüense.
El primer sancionado de la administración Trump fue el expresidente del CSE, Roberto Rivas, en el marco de la Ley Global Magnitsky. Entre las funcionarias sancionadas por primera vez figura la vicepresidente Rosario Murillo.
Uno de los contrincantes más fuerte que aparece en escena para disputar la nominación por el partido Republicano al exmandatario Trump, es el gobernador de la Florida, Ron Desantis, sin perder de vista a su ex vicepresidente Mike Pence, quien ha insinuado aspiraciones para llegar a la primera magistratura estadounidense.
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