Violencia política se disfraza como delincuencia común en Nicaragua, señala estudio
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Violencia política se disfraza como delincuencia común en Nicaragua, señala estudio


Elvira Cuadra, experta en seguridad

Un reciente estudio revela que en Nicaragua a lo largo del 2020 se incrementó la violencia letal y se expandió de zonas rurales a sitios urbanos. La política de represión del régimen de Daniel Ortega ha facilitado la ocurrencia de estos delitos, expone la experta en seguridad Elvira Cuadra.


Los datos precisan que en el 2019 ocurrieron 141 casos de asesinatos mientras que en el 2020 se registraron 264, eso significa un crecimiento del 87.2%. En promedio los asesinatos ocurridos por mes entre los dos últimos años se sitúa entre 20.6 y 22 respectivamente.


Los meses más peligrosos para la sociedad y donde más ocurrieron crímenes fueron enero (27), abril (21), agosto (22), septiembre (31) y diciembre (32). Managua, Jinotega, la Región Autónoma del Caribe Sur y Matagalpa son los sitios donde más ocurrieron los hechos.


Gráfico: Elvira Cuadra
Tendencia sostenida de violencia letal entre el 2019 y 2020.

El estudio indica que la violencia ha sido generalizada, y ejecutada en gran parte de los casos por grupos de hombres lo cual denotaría un trasfondo político. Una de las hipótesis es que "la situación de violencia política estaría disfrazándose cómo delincuencia común".

"Hay grupos de personas que han encontrado en la violencia política y el estado de impunidad que prevalece en Nicaragua, un incentivo para cometer delitos comunes, como los asaltos por ejemplo", explica.
La expansión de la violencia letal de zonas rurales a sitios urbanos

Otra de las teorías planteadas es que los asesinatos políticos se estarían encubriendo como asaltos o delitos comunes.

"Es decir, se simula que es un asalto o un robo cuando en realidad la motivación del asesinato es político. O bien, los familiares de la víctima prefieren no denunciar públicamente que se trata de un asesinato político por temor y porque ellos permanecen en sus comunidades y denunciar el hecho podría exponerlos", detalla.

El informe fue elaborado en base a notas informativas publicadas en diversos medios de comunicación en relación a los asesinatos. A partir de allí se realizó un proceso de sistematización que permitió un perfil de víctimas, de victimarios y las características del tipo de violencia.

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