La alcaldía orteguista del municipio de Diriomo del departamento de Granada, realizó una serie de actividades para celebrar las fiestas patronales de la Virgen de Candelaria, la misma imagen que por órdenes de su mismo partido, fue confinada en su templo, una contradicción que solo ellos entienden.
En el municipio a los ciudadanos les parece “torpe” y de “mal gusto” el comportamiento de sus autoridades locales. “No se si es hipocresía, disparate, no se, pero esta gente da lástima, gastan nuestro dinero para honrar a la patrona, pero no la quieren ver en las calles ¿Entonces?”, se preguntó un promesante católico de la ciudad.
La alcaldesa Sandra Vázquez, decretó el 2 de febrero día de asueto remunerado, recordándoles a los empleadores de la localidad que el municipio, “celebraba con honor y devoción a su patrona”.
En un comunicado también contradictorio, resaltan que como gobierno local, fomentan las tradiciones, costumbres y cultura religiosa. “Aquí nadie los entiende, están todos locos, el poder los tiene desvariando”, añade otra promesante.
¿En honor a quién?
Dentro de las actividades que hacen alejados de la iglesia católica, la alcaldía de Diriomo hizo la repartición de la tradicional masa de cazuela. En el pasado, este platillo era común degustarlos en las casas que recibían a la imagen de la virgen, cuando salía en procesión.
“Es triste ver que este año, la imagen no tuvo patrona, ni enramada pública, porque la iglesia misma asumió la solemnidad y cada novenario tuvo sus encargados, pero sin poder llevar la imagen a su casa, debido a que la policía prohíbe esta actividad religiosa. Entonces uno se pregunta, ¿En honor a quién reparten la masa de cazuela?”, se pregunta Dolores Sáenz.
El gobierno local promovió además, otras actividades masivas como el Festival Cultural a la Virgen que contó con el respaldo del Instituto de Turismo. Para este sábado 10 de febrero, han programado también la realización del Tope de Toros y el domingo 11, el desfile hípico.
“Aquí en Diriomo permiten barreras de toro, galleras y fiestas populares, todo en honor a la virgen, pero es prohibido manifestar su fe en las calles. Así de mal andamos, bebiatas y bailongos en honor a una imagen presa”, se lamentó la promesante.
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