
Las autoridades de Nicaragua utilizaron con Ticay el nuevo
método de represión identificado por varias organizaciones
de DDHH, que es no informar a los familiares sobre el paradero ni la condición de la persona detenida por días, semanas
e incluso meses.

En el último trimestre al menos siete periodistas independientes han tenido que irse del país debido a asedio, persecución y amenazas de paramilitares y simpatizantes sandinistas, según informe de monitoreo de Libertad de Prensa de Voces del Sur y la Fundación para la Libertad de Expresión y Democracia (FLED).
Las organizaciones defensoras de la Libertad de Prensa también denunciaron las amenazas del Gobierno contra los medios de comunicación independientes, que fueron acusados de propagar "noticias falsas" tras la noticia de la suspensión de las relaciones diplomáticas entre Nicaragua y El Vaticano.