En horas de la tarde del miércoles 18 de octubre llegaron a Mina El Limón, León, los restos de la joven Orfilia del Carmen Rivas Blandón de 27 años de edad, una de las cinco nicaragüenses que perdieron la vida en el incendio de un centro nocturno en Murcia, España.
El cuerpo de la joven llegó en horas de la mañana al aeropuerto internacional de Managua Augusto C. Sandino, desde donde fue trasladado a Mina El Limón, donde fue recibido por familiares y amigos para darle el último adiós.
Antes de ser repatriada a Nicaragua, la familia de la joven nicaragüense realizó una misa de cuerpo presente en Murcia, España, donde asistieron decenas de connacionales y amigos.
Rivas Blandón fue una de las 13 víctimas de un trágico incendio ocurrido la madrugada del 1 de octubre en el sector de discotecas conocido como Atalayas, en Murcia.
La joven de 27 años, se encontraba en la discoteca Fonda Milagros celebrando el cumpleaños de su pareja, el también nicaragüense Erick Torres, junto a él estaban su mamá Martha Alejandra Hernández Zamora de 62 años, su hermano Sergio Enrique Silva Hernández de 39 años, otra amiga Tania Martínez de 49 años, todos fallecieron calcinados.
Orfilia Blandón dejó en la orfandad a una niña de 6 años, además era el sustento de su familia con el dinero que enviaba a Nicaragua.
Las autoridades españolas continúan investigando las causas que originaron el incendio, que inició en la planta alta de la discoteca Fonda Milagros, donde se encontraban celebrando los nicaragüenses.
El ayuntamiento de Murcia informó que se hicieron cargo de los gastos de repatriación de los cuerpos de los nicaragüenses, ya que el régimen Ortega-Murillo ni la Embajada en España facilitaron ni colaboraron con el retorno.