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Médicos advierten que calores aumentarán muertes por infarto



¡Se desmayó!”, “¡Se desmayó!”, fueron los gritos de los aficionados que presenciaban el partido de fútbol comunitario en un campo deportivo de Masaya. Los onceavos se enfrentaban bajo un feroz sol de septiembre. Agner García se desplomó de repente y no se levantó más, un infarto le quitó la vida súbitamente.


Tenía 24 años y era originario del municipio de Niquinohomo. La versión de familiares y amigos es que fue el calor del día. Era un chico sano, nunca había padecido problemas cardíacos. Ese día, no vacilaron en llevarlo de inmediato al Hospital “Humberto Alvarado”, pero los médicos de turno indicaron que el joven ya no presentaba signos vitales. “Sufrió un infarto fulminante”, dijeron.


Bajo anonimato, una doctora del sistema de salud privado confirmó que los infartos son la principal causa de muerte en esta ciudad debido a las altas temperaturas del calor y otros padecimientos que “arrastran” los pacientes y que son descuidados por años.


En medio del fenómeno de El Niño, que es un invierno sin lluvias, la especialista asegura que podría existir un incremento de casos por afecciones cardíacas que desencadenaría defunciones por infarto debido a cambios de presión arterial y ritmo cardíaco.

Afectaciones cardíacas en aumento


De acuerdo a cifras del Ministerio de Salud (Minsa), en 2021 y 2022 el infarto agudo de miocardio fue la primera causa de muertes en Masaya. El Mapa de Salud, contabiliza 447 fallecimientos en 2021, y 337 en 2022, representando una tasa promedio del 11.2% y 8.4%, respectivamente, por cada 10 mil habitantes.

“Todo inicia con episodios de preinfartos; los infartos están precedidos por pequeños preinfartos que se dan por una descomposición de la temperatura o de la presión arterial o el ritmo cardíaco. Pueden haber casos debido al aumento del calor. Hay aumento de pacientes que visitan al médico o los hospitales públicos debido a los problemas de descompensación o un problema cardíaco”, explica la doctora.



“El impacto de calor por altas temperaturas puede conllevar a muchas afectaciones en la salud y se da por mecanismos múltiples; puede ser por insolación debido a la exposición directa al sol, o en aquellas personas que no necesariamente están expuestas al sol, pero sienten los cambios de temperaturas. En ambos grupos de personas, puede darse lo que es la deshidratación, puede aumentar la presión arterial, principalmente en los pacientes hipertensos”, advierte la médico.


En este tiempo, muchos pacientes presentan afectaciones cardíacas, estamos hablando de los infartos debido a los cambios de presión arterial, el ritmo cardíaco y también otras enfermedades como por ejemplo a consecuencia de la temperatura, es decir, por el aumento del calor, el sudor, el polvo, que pueden conllevar a enfermedades como alergias, eritema en la piel, además, los pacientes obesos pueden tener fricción entre el sudor y la piel”, señala la experta.

Hay que ir al médico


Sentada en una silla con ruedas y asistida por un abanico de tamaño promedio, así se encuentra doña Olga Aburto, una paciente asmática crónica de 88 años de edad, quien resiste a las altas temperaturas de calor que superan los 35 grados en la región del pacífico, según registros del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter).


El reloj marca las 12:00 del mediodía y doña Olga aún permanece en su cuarto soportando el calor. Salir al patio o al porche de su casa, nunca ha sido una opción para esta anciana que también se rehusa a visitar el Hospital “Humberto Alvarado” de Masaya, pese a la descompensación que sufre debido a estas temperaturas invernales cálidas que azotan al país.


“No me gustan los hospitales; si voy ya no vuelvo, ahí te matan. Mejor aquí aguanto el calor aunque está ‘arrecho’, pero ahí tengo mi medicina y me ponen ese nebulizador. Aquí estoy bien”, asegura mientras el cansancio se le nota en el tono de su voz.

Para otro médico del sistema de salud público, quien prefirió el anonimato por temor a represalias, las visitas al centro de salud deberían ser constantes en pacientes crónicos, y aquellos que padecen afectaciones o cambios en el ritmo cardíaco. En estos casos, es necesario una asistencia médica para un mejor control y tratamiento de los padecimiento ante el impacto de las altas temperaturas cálidas que azotan en mayor medida durante horas del mediodía, recomendó.


Llaman a la hidratación y el cuido de la salud


En ese sentido, ambos médicos coinciden en que es necesario hidratarse tomando “abundante líquido, usar ropa clara o ropa ligera, evitar estar en aglomeraciones de personas, buscar lugares frescos donde no estén expuestos al sol, es decir, ubicarse en los jardines y debajo de los árboles”.


En el caso de los pacientes que tienen enfermedades crónicas, aseguran que es necesario que continúen su tratamiento al pie de las indicaciones médicas para evitar una complicación mayor.

“En los deportistas es importante hidratarse y tener una exposición mínima al sol. Los cambios de temperatura bruscos, pueden causar resfriados comunes o los procesos respiratorios, incluso hasta pueden haber espasmos musculares, pueden haber cambios en los tejidos del cuerpo, pueden haber dolores musculares porque al estar en ejercicios continuo o movimiento articular, y luego pasan a un cambio de temperatura, puede provocar una alteración; dolores, artralgia, etc.”, expresa la doctora.


Por su parte, el galeno finaliza advirtiendo sobre la necesidad de asistir a los hospitales para realizarse chequeos de rutina y evitar complicaciones en la salud, sobre todo en pacientes crónicos. Además, recuerda que quienes padecieron de un infarto que le provocó la muerte es porque “hubo un precedente y nunca se detectó a tiempo”, es decir, pudo haber presentado complicaciones en la “edad infantil o neonato, o edad pediátrica” y que luego se desarrolló a cierta edad como la adolescencia o la juventud.


“Normalmente los casos que se dan de infartos en las personas jóvenes son en deportistas que consumen ciertos energizantes, suplementos, ciertas sustancias que aparentan no ser nocivas para el cuerpo pero al final, va provocando un daño hasta desencadenar fatalidades cuando hay una actividad física bastante fuerte, desenlazando un infarto, incluso la muerte”, finalizó.


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