Hay una evidente persecución contra el periodismo en Nicaragua
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Hay una evidente persecución contra el periodismo en Nicaragua





La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) catalogó como "descarada" la usurpación por parte del Gobierno Ortega-Murillo del histórico edificio del diario La Prensa, que fue oficialmente desmantelado el pasado 23 de agosto.


Para la SIP, "la consumación del robo" a las instalaciones del medio escrito solo ratifica la evidente persecución Gubernamental contra el periodismo independiente en Nicaragua.


"Con gran descaro, el régimen legaliza y consuma la usurpación de todos los bienes y el edificio de La Prensa...estamos frente al régimen que se ha convertido en el mayor represor de América", dijo Jorge Canahuati, presidente de la SIP.

Asimismo, Carlos Jornet, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e información de la SIP dijo que el Gobierno manipula los recursos a su alcance para "eliminar medios incómodos", pasando por encima de la Constitución.

En diciembre de 2018, Confidencial y 100% Noticias fueron confiscados por el Gobierno, y más tarde sus edificios fueron "donados" al MINSA y convertidos en una casa materna y el otro en un centro de atención para personas con adicción al alcoholismo y drogadicción.


"Los enterrados serán ellos"


La junta directiva del diario La Prensa respondió al gobierno de Daniel Ortega tras la confiscación del edificio donde funcionaba el medio de comunicación y por las acusaciones realizadas por Rosario Murillo en contra de ese periódico.


"Como ha sucedio en otras ocasiones, los enterrados serán ellos", manifestó la junta directiva en un pronunciamiento de cuatro páginas donde reseñan la historia del medio, que sobrevivió a tres dictaduras en sus más de 90 años de historia.



Redacción al exilio


En el mes de julio, La Prensa anunció que su redacción completa se vio obligada a salir de forma irregular del país como una manera de resguardar su seguridad y libertad ante el incremento del asedio a sus periodistas, editores, fotógrafos y otro personal.


La salida de los periodistas se dio tras la detención de dos colaboradores que dieron cobertura a la expulsión de las hermanas de la Caridad.



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