Laureano Ortega Murillo, presidió esta tarde el acto de entrega de los 250 buses chinos a transportistas de la capital, en reemplazo de su padre, Daniel Ortega y de su madre, la vocera Rosario Murillo.
A pesar que la circular enviada por el Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos (TELCOR) informó que la cadena de radio y televisión sería presidida por Ortega, esto fue no fue así, y en su lugar estuvo Laureano, que ocupa el cargo de asesor para las inversiones, comercio y cooperación internacional.
El hijo de los Ortega-Murillo, ha sido el encargado de llevar a cabo las negociaciones de los diversos acuerdos firmados con China, incluida la compra de los buses de la marca Yutong, que busca "mejorar" el transporte público en la capital.
A diferencia de su padre, Laureano no dio discursos de dos horas, sino que fue breve y la comparecencia duró aproximadamente 50 minutos.
Ortega Murillo alabó el socialismo y el partido comunista de China y dijo que con la ayuda del país asiático Nicaragua saldría de la pobreza extrema y tendría "prosperidad".
"Dos partidos que se dedican a restituir los derechos de sus pueblos, que ponen los derechos de sus ciudadanos por encima de todas las cosas, que reconocen la importancia del ser humano, del desarrollo integral para todos, para alcanzar así la prosperidad, el bien común... Para nosotros es un ejemplo de como el socialismo nos lleva al desarrollo...Nos dan una luz de esperanza a Nicaragua y al mundo entero", dijo Laureano.
Finalmente, el hijo de los Ortega-Murillo continúo alabando la cooperación entre China y Nicaragua y al igual que el mandatario culpó a la derecha por el supuesto "olvido" de los transportistas y de mejorar el transporte público.
En el acto estuvo presente el embajador de China en Nicaragua, la alcaldesa Reyna Rueda, y el Ministro de Transporte Óscar Mójica.
Esta es la primera vez que Laureano asume un acto oficial y reemplaza a su padre. Sin embargo, Ortega ya lo ha designado para firmar acuerdos importantes a nivel internacional.