En el marco de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) que se realiza en Nueva York, Estados Unidos, el Canciller de Costa Rica, Arnoldo André, sostuvo una reunión con Antonio Guterres, Secretario General ONU donde expuso la grave situación migratoria que aqueja a ese país.
De acuerdo al comunicado emitido por la Cancillería costarricense, André solicitó a Guterres un "mayor apoyo finaciero" debido a la cantidad sin precedentes de solicitudes de refugio y a pesar de haber aprobado miles, todavía tienen pendiente 250 mil casos.
El Canciller, dijo que su país no puede destinar más dinero del presupuesto a esta situación migratoria, por lo que piden mayor apoyo a las organizaciones internacionales.
"Costa Rica no puede crecer en gasto público por un tema fiscal que debemos respetar y por eso urgimos de mayor apoyo financiero internacional", dijo en la reunión privada con el Secretario General de la ONU.
La mayor parte de las solicitudes recibidas en Costa Rica, son de su país vecino Nicaragua, esto debido a que desde 2018 miles de nicaragüenses han huido por la persecución y violaciones a derechos humanos que ha cometido el régimen de Daniel Ortega.
Otro de los temas que abordó André con Guterres fue la situación de derechos humanos en Nicaragua y que a pesar de la evidencia, hay poca conciencia a nivel mundial sobre la gravedad de este asunto.
"Llamó la atención el panorama inestable en varios países de la región, especialmente en Nicaragua, y lamentó que no haya conciencia sobre la gravedad del caso ante las constantes violaciones a los derechos humanos que sufren los nicaragüenses", reza el texto divulgado por la Cancillería.
Volker Türk, de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), dijo en la presentación del informe actualizado sobre Nicaragua que la situación se continúa "deteriorándose gravemente", ya que se han "limitado indebidamente" los espacios cívicos y democráticos.
"...el Gobierno ha reducido el espacio cívico y democrático hasta un punto que no deja lugar a la disidencia. Sin embargo, las personas defensoras de los derechos humanos siguen trabajando, tanto en Nicaragua como en el exilio, abogando por la rendición de cuentas", dijo Türk en su presentación.