El primer informe presentado por el Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua (GHREN), es una pequeña mirada a lo vivido por decenas de víctimas de tortura, tratos crueles e inhumanos, entre otras violaciones a los DDHH cometidas por el régimen de Daniel Ortega a partir de 2018, en medio de las protestas cívicas.
Para Juan Carlos Arce, del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca +, la creación del GHREN constituye un "hito" en la historia del país, ya que refleja un impulso importante en la búsqueda de justicia y no repetición de estos actos crueles en contra de personas inocentes.
El defensor de DDHH, refiere que el GHREN en su informe, ha ido "más allá", ya que además de identificar en términos abstractos la comisión de crímenes de lesa humanidad, identifica las ejecuciones extrajudiciales, las detenciones arbitrarias, los tratos crueles, inhumanos y la persecución política, como crímenes de lesa humanidad.
"Estamos hablando, que una instancia tan importante ha identificado la comisión de gravísimos crímenes de lesa humanidad que están en el Estatuto de Roma", dijo Arce en entrevista para el programa Fuentes Abiertas.
El Estatuto de Roma es un tratado internacional que tipifica y establece la competencia de la Corte Penal Internacional (CPI) sobre los casos más graves de violaciones a los derechos fundamentales: la agresión, el genocidio, crímenes de lesa humanidad y los crímenes de guerra.
Daniel Ortega sinónimo de crueldad
Si se busca en el diccionario la palabra cruel, lo más seguro es que aparezca una fotografía de Daniel Ortega y Rosario Murillo a la par, ya que las investigaciones y relatos de las víctimas demuestran la saña con la que han actuado en contra de los civiles, únicamente por no compartir el mismo punto de vista.
Arce refiere que los informes de DDHH no mienten, y denotan la gravedad del asunto de lo que ha ocurrido y continúa pasando en Nicaragua.
"Quiero ser claro, en ese sentido, no existe en este momento, en el continente americano un régimen que esté siendo señalado de la comisión de esa cantidad de crímenes de lesa humanidad, es decir, esto te denota un poco la gravedad del asunto, te denota también un régimen que no tiene límites, que es imparable en la represión", expresó.
La actualización del informe del GHREN, presentado en septiembre de este año ante el Consejo de DDHH de la ONU, incluyó el destierro, y el despojo de la nacionalidad en la categoría de crímenes de lesa humanidad y advirtió que Ortega ha recrudecido la persecución a los opositores.
También incluyó la eliminación de los registros de nacimiento, confiscación de bienes, cancelación del pago de pensión, y amenazas contra las familias de los opositores.
"desgraciadamente la represión no solamente no ha parado sino que ha continuado y se ha agravado, es decir, el regimen Ortega-Murillo, han sido, digamos un régimen que se caracteriza por su enorme capacidad de hacer daño sin importar el sujeto, es decir el régimen se ha metido con la familia, se a metido con los niños, a separado niños, niñas de sus madres, de sus padres", señala Arce.
Documentación es clave para un juicio
El defensor, explica que es de vital importancia que los nicaragüenses y organizaciones de derechos humanos, documenten todo lo que ha ocurrido durante este período negro del país, que está marcado por la crueldad de los Ortega-Murillo contra personas civiles.
"No existe en este momento una situación que haya sido tan documentada como ha sido la situación de DDHH en Nicaragua, y en este momento quizá no se le da el valor que tiene, pero en su momento todo el trabajo investigativo que ha hecho el GHREN va a ser fundamental para la identificación de los perpetradores, va a ser fundamental para llevarlos a los procesos judiciales que se van a abrir en un momento", manifiesta.
De igual forma, destaca que es necesario que las víctimas de estos delitos sigan enviando información, y se contacten con el Grupo de expertos a través de los canales que han sido dispuestos, para que así se siga "alimentando" el expediente que será fundamental para castigar a los más de 154 perpetradores que han sido identificados por el Colectivo Nunca +.
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